Primero fue Valorant, a quien le dediqué una dura crítica en su beta, y en la cual me mantengo. Siguió la beta de Rogue Company, que está aún en desarrollo. Una breve pausa, la aparición de Fall Guys, que se cuece completamente aparte, pero que muchos emparejan con el éxito de Among Us por factores que no tocaremos en este análisis. Y ahora, Genshin Impact.
¿Qué tienen en común los juegos mencionados, con la obvia salvedad de Fall Guys? Son gratis. Y sumamente populares.
Al momento de escribir estas líneas, Among Us es el segundo juego con más espectadores en Twitch solamente, con más de 300 mil. Genshin Impact es el décimo, con 68 mil. Valorant en doceavo, con 45 mil. Rogue Company agotó, al parecer, su efímero hype, pero aún así lo está viendo más gente que otros juegos con estatus de leyenda, como Borderlands 3, Super Mario Maker 2 o incluso Osu!, que es prácticamente el entrenador por excelencia, a lado de Aim Hero, de todos aquellos que juegan First Person Shooter. Y por supuesto, en los puestos altos también hay caras conocidas, como League of Legends, en cuarto puesto, y Fortnite, en sexto lugar. Ambos títulos gratuitos. Un poco más abajo, otro FTP, Apex Legends.
Obviamente, y como nota al margen, estas cifras fluctúan mucho, y a veces con escasos márgenes, pero la fotografía del momento nos permite apreciar más o menos donde estamos parados.
Una conducta interesante
Bueno y, ¿The Last of Us 2? ¿El recalentado de Mario 3D Trilogy? ¿Dónde está Ghost of Tsushima, que fue un juegazo? ¿Wasteland 3? ¿Captain Tsubasa: Rise of New Champions? ¿Watch Dogs: Legion?
Ni siquiera cerca. En la mayoría de los casos, The Witcher 3: Wild Hunt se está viendo más en el momento en que escribo este artículo.
Una parte de la lógica, que a veces funciona en este mundo extraño, me indicaría que debería ser al contrario. La gente vería los juegos de pago porque, debido a una u otra circunstancia, no lo poseen, y les sirve para a) acompañar la experiencia o b) tener un asidero audiovisual que les permita dilucidar si vale la pena o no comprarse el título a futuro.
Pero no, la audiencia en este instante, la abrevan los títulos gratuitos.
Tú, que estás leyendo esto, probablemente me dirás: “Pues sí, esto ha sido toda la vida, lo gratis es más popular, mencionaste hace un momento a Fortnite y LoL, ¿Qué esperabas?”
A lo cual respondo que, realmente, no esperaba nada. Pero lo cierto es que este año hemos tenido una explosión de juegos gratis. League of Legends salió en 2009, Fortnite en 2017, Apex Legends, en 2019. Tres juegos populares, gratuitos en tres años distintos, un espacio de una década entre los tres, si mucho me apuras. Y ahora, sin que aún termine 2020, cuatro juegos que han dado de qué hablar. Y después de esta enorme introducción, es hora de explicar, desde mi perspectiva, por qué.
Un año interesante
Este año ha sido interesante en lo general. Nadie me puede decir que la característica de este año es que haya sido “aburrido”. Y una parte amplia de ello es el cambio abrupto y las pausas de emergencia que ocasionaron la pandemia de Covid-19 en todo el planeta. Gracias, China.
Obviamente, el mundo entero se tuvo que poner en cuarentena. Las actividades económicas se paralizaron. El mundo tuvo que volver a un estado que no había experimentado desde que nos apiñábamos en cuevas para evitar que nos comieran tigres gigantes.
Mucho tiempo libre. Y muy solitario.
Las dinámicas sociales se vieron obligadas a cambiar. Para los gamers esto no supuso mucha diferencia. Pero tuvieron que enseñarle a los que no juegan, las mieles de los multiplayers. Y con tanto tiempo libre, era cuestión de tiempo.
En el mejor de los casos, probablemente se siguió trabajando como si nada pasara. En el peor, se dejó de trabajar.
Esto supone una caída brutal en la economía. En junio, el Fondo Monetario Internacional proyectó una caída del PIB mundial de 4.9%. En abril habían vaticinado que esto es la crisis más grande que se vivía desde la Gran Depresión de 1929, incluso mayor que la Gran Recesión de 2008. Eso, en términos fáciles de entender es un mundo muy, muy pobre.
Si tienes el tiempo de jugar, pero no el dinero para jugar, claramente irás con la opción gratuita.
Es por eso que, desde esta perspectiva, se explica tanto boom, aunque efímero, de los juegos gratuitos.
No es lo mismo un juego gratis en 2018 que uno en 2020, aunque eso parecía antes de este cambio tan abrupto. La pandemia le dio cierto halo de necesidad a los juegos gratuitos. Y si muchos de ellos permitían compartir la experiencia con otras personas en internet, qué mejor.
El interesante caso de Among Us
De entre los juegos que listé al principio del artículo, Among Us me parece el más emblemático de lo anterior.
La premisa de un multijugador con uno o dos “impostores” cuyo trabajo sea ser el lobo con piel de oveja no se inventó con este juego. Ya había uno, igual Free to Play, llamado Deceit. Mejores gráficas, más dinámicas, la posibilidad de defenderte (o intentar defenderte) del impostor al transformarse en un monstruo, y un toque de terror.
¿Por qué no fue tan popular, considerando que Among Us ni siquiera es de este año? Fácil.
Among Us, careciendo de todas estas dinámicas, era más simple. Y más fácil de comprender. Cualquier “sucio casual” (en la a veces chocante jerga gamer) podía entender qué pasaba, sin necesidad de dominar términos extraños.
En segundo lugar, su disponibilidad. Un juego sumamente ligero de 250 megas de espacio en disco y que solo pedía 1GB de tu memoria RAM. Y con crossplay en celulares y computadora. Cualquiera puede jugarlo, sin importar si eres poseedor de una computadora gamer o una laptop de hace 8 años.
Eventualmente su chispa se apagó, pero nadie puede negar el fenómeno que fue en su momento.
El aún más interesante de Genshin Impact
Oh sí. Tenía que mencionar este nene.
Probablemente el primer RPG asiático que tenemos en occidente traducido en mucho tiempo, y el mayor lanzamiento internacional de un juego desarrollado en China de la historia.
Otro juego Free to Play que aprovechó el “desinflamiento” de Among Us, y de qué manera. También multiplataforma, este juego, a pesar de tener una estética de anime preciosísima y una banda sonora más allá de hermosa, consume muy pocos recursos, al grado de poderse jugar en dispositivos móviles sin mayor problema, claro que con especificaciones más grandes que Among Us (3GB de RAM y 8GB de almacenamiento para celular).
De historia aun en desarrollo, constantes actualizaciones y un sistema “gacha” sumamente hostil, este título tiene lo necesario para enganchar jugadores, y en casos muy extremos, dejarlos en la más cruda miseria. Este juego, que en su momento fue comparado con Breath of the Wild, demostró ser mucho más ambicioso debajo de su capa de juego gratuito.
Interesantísimo Apex Legends
Mención aparte, y ya para terminar, mecere Apex Legends. Cuando comencé este artículo, aún no se estrenaba la temporada 7 de Apex Legends, que supuso un mapa nuevo, Olympus.
Este juego experimentó con ello un rebote en su popularidad que no había sido visto desde su lanzamiento. Parte de ello por la frescura renovada a este Battle Royale, y parte por los cambios de balance y solución de errores, que en su momento ahuyentaron a más de uno.
Esto demuestra, que hasta juegos gratuitos que dábamos por muertos experimentaron un repunte con las decisiones correctas, dejando muy atrás a otros títulos de pago que se han dedicado a repetir eventos limitados tanto de tiempo como de recompensas cada cierto tiempo, completamente dormidos en sus laureles.
Ya para concluir
Probablemente estos juegos sean punta de lanza para mejores opciones para la comunidad gamer a costo asequible en el futuro. Probablemente no. Este artículo, al final del día, solo aporta una teoría de cómo lo económico impactó en el gaming, a gran escala, sin importar si eras tryhard o casual.
Como siempre déjanos acá abajo tus comentarios, y recuerda que ser cool #EsDeGamers.